Durante 2021 Cinvestav celebró su 60 Aniversario como una institución de clase mundial

Durante 2021 el Cinvestav celebró su 60 Aniversario como uno de los centros de investigación más importantes de México y diversas clasificaciones, como la del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, de España, lo ubicaron entre los primeros lugares de América Latina.

Es líder en México en programas nacionales de posgrados de calidad y de competencia internacional, equiparables a los mejores del mundo; además en su historia han otorgado más de 16 mil grados de maestría y doctorado. Su planta docente se integra por 614 académicos, 97 por ciento de ellos pertenece al Sistema Nacional de Investigadores y atiende una matrícula de tres mil 192 estudiantes, quienes en el último año publicaron mil 577 artículos científicos.

Creado el 17 de abril de 1961, el Cinvestav tiene cooperación nacional e internacional con instituciones de investigación de 38 países y mantiene vinculación con empresas, gobiernos e instituciones de educación superior; fue una iniciativa de Manuel Cerrillo, Eugenio Méndez, Víctor Bravo y Arturo Rosenblueth para fundar una escuela de posgraduados, con elevados estándares de rigor académico, que contribuyera a fomentar la técnica moderna.

Esa idea se plasmó en su misión de desarrollar ciencia básica y aplicada de punta con el propósito de formar recursos humanos altamente capacitados; se ha distinguido por contribuir a resolver problemas nacionales, compromiso que refrendó durante la pandemia por covid-19, al emprender cerca de 80 líneas de investigación: también destacan sus aportes para combatir enfermedades como cáncer, chagas, dengue, amibiasis, tricomoniasis, diabetes y epilepsia. Para fortalecer el sector alimenticio y agropecuario, ha descifrado el genoma de diversas variedades de plantas como maíz, frijol o chile.

El Cinvestav inició operaciones con cuatro departamentos: Física; Fisiología Biofísica y Neurociencias; Matemáticas; e Ingeniería Eléctrica que en 60 años se han consolidado como referentes científicos a nivel nacional e internacional, gracias a la constante innovación de su propuesta académica, la formación de sus estudiantes y la calidad de sus investigadores.

El Departamento de Física ha logrado consolidar cinco grupos de investigación dedicados al estudio de Altas Energías; Estado Sólido, Nanociencias y Nanotecnología; Estadística y Materia Condensada Blanda; Geometría y Gravitación; y Gravitación y Física Matemática, esto les ha permitido participar en los laboratorios internacionales líderes en esas áreas como el Gran Colisionador de Hadrones del CERN, el acelerador SuperKEKB, el proyecto Dark Energy Spectroscopic Instrument o el Observatorio Pierre Auger.

La principal aportación del Departamento en su trayectoria ha sido la formación de generaciones de recursos humanos altamente capacitados, que han diseminado el conocimiento científico en el país y parte de sus egresados se encuentran en diversas universidades mexicanas capacitando e instruyendo a nuevos cuadros, modelo que se replica en países de Centro y Sudamérica.

En el caso del Departamento de Fisiología Biofísica y Neurociencias, han generado conocimiento con impacto en la salud, la biotecnología y la industria farmacéutica mediante el diseño de nanoestructuras y plásmidos para el envío de genes a sitios específicos del cerebro y a otros órganos; la caracterización de mecanismos involucrados en males neurodegenerativos, inflamatorios, intestinales, cáncer, dolor neuropático y los provocados por pesticidas o virus, incluidos Zika y SARS-CoV-2.

Tres de sus investigadores han recibido el Premio Nacional de Ciencias y Artes, además uno fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias; actualmente se concentra en el acceso de medicamentos, fármacos y terapia génica a través de epitelios y endotelios; diferenciación, desarrollo, inflamación y cáncer; integración sensorial y motriz en la médula espinal; medio ambiente y lesión celular; neurobiología del desarrollo; biofísica y biología molecular de canales iónicos; patologías del sistema nervioso; y neurofarmacología.

El Departamento de Matemáticas, fundado por Carlos Ímaz, Samuel Gitler y José Ádem, en seis décadas de existencia ha publicado más de mil artículos en revistas con prestigio internacional, y cuenta con una producción promedio anual de publicaciones académicas de 1.2 por investigador, mayor a la de Estados Unidos, y ha cumplido con su misión de aportar conocimiento y formar matemáticos jóvenes que enriquecen a universidades, centros de investigación o al sector privado.

El Departamento cobró notoriedad en la comunidad científica por sus aportaciones en la topología moderna y en las operaciones cohomológicas secundarias, lo que le permitió obtener contribuciones revolucionarias en el problema de inmersión euclidiana de espacios proyectivos; además, el trabajo de Samuel Gitler con su obra de 1972, "A spectrum whose cohomology is a certain cyclic module over the steenrod algebra", se convirtió en un texto imprescindible de la topología algebraica del siglo XX.

Por su parte, el Departamento de Ingeniería Eléctrica con sus secciones de Comunicaciones, Electrónica del Estado Sólido, Bioelectrónica y Mecatrónica, realiza investigación en materia de salud, educación y servicios urbanos; además, emprende temas como bioinstrumentación, redes de comunicaciones, nanoelectrónica, dispositivos semiconductores, circuitos integrados, robótica y rehabilitación.

Sus proyectos emblemáticos han sido la Planta Piloto de Producción de Celdas Solares para llevar energía eléctrica a comunidades rurales; la colaboración con la NASA; el programa MicroSEP para introducir tecnologías de cómputo en el sector educativo; la supervisión y control electrónico del sistema computarizado de la red de drenaje; el desarrollo de nuevas arquitecturas de red y protocolos de comunicación; también ha creado  instrumental médico y busca comprender la fisiología, biofísica y biomecánica en el deporte, efectos de ondas electromagnéticas y ultrasonido con fines terapéuticos y el modelado para el control de sistemas biónicos.

Cinvestav fue pionero en la descentralización científica y hoy tiene presencia nacional con 12 sedes, ubicadas en 10 entidades, donde fomenta el desarrollo científico, tecnológico y las actividades productivas de cada zona, a través de la formación de grupos de investigación de alto nivel, varias de las cuales festejan aniversarios emblemáticos de labor académica e impulso tecnológico.  

Por ejemplo, la Unidad Irapuato que celebró 30 años de existencia y trabaja en aspectos agroalimentarios con un enfoque vanguardista mediante el estudio de la biotecnológía, bioquímica de plantas e ingeniería genética vegetal. En el caso de la Unidad Tamaulipas, que cumplió 16 años de trabajo, enfoca su investigación, desarrollo tecnológico y formación de recursos humanos a nivel posgrado en temas relacionados con tecnologías de la información como inteligencias e ingeniería computacional, gestión de datos y redes.

Por su parte, el Departamento de Investigaciones Educativas conmemoró su 50 Aniversario destacando, en sus primeros años, la elaboración de los textos de enseñanza a nivel primaria; consolidó su propuesta académica en tópicos como procesos sociales, culturales y políticos; procesos psicológicos y lingüístico; e historia de la educación; además abordó la enseñanza de las ciencias y matemáticas, así como la formación docente. En la actualidad trabajan en aprendizaje y desarrollo de la lengua escrita, y análisis de la relación entre escuela y comunidad, entre otros.

Todos estos logros científicos y tecnológicos han sido posibles por el compromiso y dedicación de toda su comunidad que, con base en su trabajo, posicionó al Cinvestav como una institución de clase mundial.