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La génesis del alzheimer no es única, existen múltiples factores
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La génesis del alzheimer no es única, existen múltiples factores

Gracias a Alois Alzheimer, desde hace más de 100 años existen los primeros registros de la enfermedad que lleva su nombre. Para el neurólogo y siquiatra alemán, quien descubrió y describió los síntomas de la enfermedad. A partir de ello comienza la investigación de este padecimiento; sin embargo, hasta ahora no hay algún tratamiento efectivo.

Esta enfermedad demencial es del tipo crónico-degenerativa, en la cual las neuronas se van muriendo dentro del cerebro de las personas, y con ello pierden sus capacidades cognitivas, ocasionando pérdida de la memoria, incapacidad de reconocimiento de las personas, su entorno, las situaciones que vive, los momentos o lugares y, en el peor de los casos, pueden ignorar la capacidad de autorreconocimiento.

Marco Antonio Meraz Ríos, investigador del Departamento de Biomedicina Molecular del Cinvestav, explicó que existen dos tipos: la esporádica (también conocida como “estadio tardío”), que es la más común entre la población afectada (95 por ciento la presenta), los síntomas aparecen después de los 65 años y tiene factores de riesgo como la edad, proteínas (entre las que se encuentra la apolipoproteína E4), genes asociados con inflamación, estrés oxidativo, metales pesados en el cuerpo o golpes en la cabeza.

Otra variedad en la conocida como de inicio temprano, aparece en individuos con menos de 65 años de edad y dentro de ésta se incluye la forma Familiar del Alzheimer, la cual se debe a mutaciones en tres genes: Presenilina 1, Presenilina 2, y el gen de la Proteína Precursora del Amiloide, conocida como APP. Estas mutaciones llevan al origen del alzheimer de tipo hereditario (Familiar).

En ambos casos se produce la acumulación de dos agregados proteicos importantes en el cerebro: por un lado las placas neuríticas, que son depósitos de proteína beta-amiloide, la cual se deriva de la proteína APP, que provocan que las conexiones de las neuronas se degeneren, estas placas a su vez generan inflamación, dañando los circuitos neuronales; por otro lado las marañas neurofibrilares, constituidas por la proteína tau, la cual ayuda a que los microtúbulos se puedan estabilizar. Cuando esta proteína se procesa mal se junta con otras proteínas hasta formar oligomeros que se precipitan en el interior de la célula formando una especie de zacate difícil de digerir, matando a la neurona.

La investigación del doctor Marco Antonio Meraz en Cinvestav está enfocada a los dos tipos de alzheimer. “Tenemos la capacidad de aislar células mesenquimales de la nariz y las estamos estudiando para ver cuáles son los factores, las proteínas, las moléculas que las regulan y que se alteran con la mutación que causa la enfermedad. En el caso del alzheimer esporádico estamos evaluando los factores de riesgo genético que hacen que un individuo sea más susceptible de desarrollar la enfermedad”, mencionó el investigador.

Existe un elemento fundamental que es la predisposición genética, lo cual es muy importante no sólo en este tipo de enfermedad, sino en casi todas. Adicionalmente, condiciones como la obesidad, la diabetes, el estrés oxidativo, el tabaquismo, el alto consumo de alcohol o los golpes fuertes y continuos en la cabeza pueden influir en una persona al deterioro cognitivo.

Hasta la fecha no existe un tratamiento efectivo contra la enfermedad por varias razones. En el caso del Alzheimer Familiar se requiere corregir las mutaciones de las proteínas afectadas para ayudar realmente a las personas, sin embargo, Marco Antonio Meraz aseguró que es posible dentro de poco tiempo, la terapia celular pueda ser una alternativa real en el tratamiento efectivo para el alzheimer”.

En el caso del alzheimer esporádico lo que se ha tratado de hacer es desarrollar vacunas dirigidas a las placas neuríticas, pero desafortunadamente el cuerpo ha respondido mal al tratamiento; por ello, se sigue investigando para ver de qué manera revertir el proceso y lograr que aquellas células afectadas se puedan salvar o reemplazar”, comentó el investigador. Se espera que dentro de poco exista un tratamiento efectivo para este padecimiento.

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