Conexión Cinvestav / miércoles, 27 de marzo de 2019 / Categorías: Boletin de prensa Manglares ayudan a mitigar cambio climático México cuenta con 742 mil hectáreas de manglares, 55 por ciento de ellas ubicadas en la Península de Yucatán, que representan 5.4 por ciento de la superficie global de este tipo de ecosistemas. Esas cifras cobran mayor valor al saber que estos espacios tienen capacidad de mitigación del cambio climático. De acuerdo con Julieta Nazareth Gamboa Cutz, investigadora del Cinvestav Unidad Mérida, la importancia de conservar los manglares radica en los múltiples servicios ecosistémicos que brindan, de acuerdo a su composición y estructura, destacando el relacionado a la mitigación del cambio climático, mediante la captura y almacén de carbono. Gamboa Cutz realizó una investigación sobre los “Almacenes y captura de carbono orgánico en manglares del sistema lagunar hiperhalino ‘Mar Muerto’ en la costa de Chiapas-Oaxaca”, cuyo objetivo fue estimar los almacenes de carbono en sitios conservados, restaurados y degradados, así como identificar sus variables ambientales en lugares cuya salinidad varia en la época seca. El estudio se enfocó en la estimación de la captura de carbono en sitios restaurados con dos técnicas: rehabilitación hidrológica y plantado, con el fin de identificar cuál permitía mayor captura de carbono y qué variables controlaban dicha captura; además se estimó las emisiones de bióxido de carbono que se evitan gracias a la conservación de los manglares, o que podrían emitirse a la atmósfera si fueran degradados. Los manglares conservados de este sistema lagunar, evitan emisiones de 748 CO2 (medida universal utilizada para indicar la posibilidad de calentamiento global de cada gas de efecto invernadero, usada para evaluar los impactos de la emisión, o evitar la emisión, de eso gases) para Chiapas y Oaxaca. Lo anterior “se puede traducir como el consumo de 318,512 litros de gasolina, 362,036 kilos de combustibles fósiles quemados y más de 2 millones de kilómetros recorridos por un vehículo promedio de 4 pasajeros”, explicó Julieta Nazareth Gamboa Cutz. El almacén de carbono se refiere a la cantidad de carbono presente (stock) en el ecosistema de manglar, y puede dividirse en aéreo, (árboles, plántulas y madera muerta) y subterráneo (raíces y sedimento). Mientras que la captura de carbono se refiere a la cantidad de carbono que obtienen en un tiempo determinado. El CO2 es el gas de efecto invernadero que ha tenido mayor impacto negativo en los ecosistemas, sin embargo, también puede ser capturado por las plantas mediante el proceso de fotosíntesis, convirtiendo el carbono en carbohidratos y almacenándolo en forma de biomasa. En esta dinámica, los manglares desempeñan un rol importante ya que el suelo y las raíces también tienen la capacidad de capturar carbono y dadas las características anaerobias de los suelos de manglar, el carbono se almacena en lugar de convertirse en CO2. La importancia de los manglares se observa en términos de mitigación de cambio climático, porque a mayor superficie de manglar, mayor almacén y captura de carbono mediante la conversión de CO2 a carbono; de ahí la necesidad de conservar los existentes y de restaurar los degradados. La investigación se realizó en el “Mar Muerto” en la costa de Chiapas-Oaxaca porque en temporadas secas, la salinidad de esta zona puede ser casi tres veces mayor que la salinidad del agua de mar, exponiendo a los manglares a altas salinidades y elevadas temperaturas debido a la evaporación, por lo que resulta importante conocer las variables que influyen en el almacén y captura de carbono. La alta salinidad de esta zona le confiere características estructurales a la comunidad de manglar similares a los de sitios áridos, sin embargo, no es la variable que controla más significativamente el almacén de carbono total del ecosistema, lo que indica que estos manglares están adaptados a características salinas; sitios de manglar rojo (Rhizophora mangle) presentaron mayor almacén de carbono aéreo y subterráneo. El estudio observó que la rehabilitación hidrológica fue la técnica de restauración más exitosa en términos de captura de carbono y se sugiere como herramienta de rehabilitación para sitios degradados de manglares del sistema lagunar hiperhalino “Mar Muerto”. Artículo anterior Vista área del Cinvestav después de treinta años Siguiente artículo Dan cazadores mayas un valor multidimensional al perro Print 4184 Tags: Unidad MéridamanglaresCO2