Urgencia de resultados científicos

Durante la segunda jornada del Conversatorio para el Análisis del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, el titular del Cinvestav, José Mustre de León, dijo que, a diferencia de otros sectores donde existen claras debilidades estructurales que provocan desigualdad, violencia y corrupción, el sistema de investigación científica del país es competitivo, por lo que se debe valorar como una de las fortalezas del país.

Para el Director General del Cinvestav, si bien una parte de la sociedad exige de manera inmediata un impacto social y contribución al desarrollo económico del país por parte del trabajo científico, el sistema de ciencia, tecnología e innovación nacional es competitivo a nivel mundial, por lo que no requiere un cambio fundamental, sino ajustes para su fortalecimiento.

Aunque el Director General del Cinvestav reconoce que la comunidad científica debe comunicar de forma extensiva a toda la sociedad los resultados de sus investigaciones para destacar la importancia de las mismas, lo cierto es que ve necesario incrementar el número de investigadores, ya que actualmente se cuentan con 29 mil miembros del Sistema Nacional de Investigadores, lo que resulta insuficiente para un país como México de 120 millones de habitantes.

Al respecto señaló que países con economías similares a la nuestra, como Brasil, el número de investigadores es tres veces mayor, de modo que la aspiración debe ser hacia el incremento de la planta de investigadores.

“Ese limitado número de investigadores puede dificultar que se note el impacto inmediato que tiene la ciencia para el país, por lo que esta tarea de que el sistema de investigación siga creciendo debe ser prioritario como nación para poder incrementar los resultados deseados”, señaló.

Como ejemplo de lo que la ciencia y tecnología puede ofrecer al beneficio y desarrollo nacional, citó ejemplos de lo realizado en el pasado reciente en el Cinvestav, como el beneficio a 55 millones de estudiantes de nivel básico que tuvo durante las últimas tres décadas del siglo pasado el proyecto de la elaboración de los libros de texto gratuitos de educación primaria, solventada en la parte científica por el Departamento de Investigaciones Educativas del Centro.

Asimismo, en 2009 el grupo de Genómica para la Diversidad del Cinvestav fue el primero a nivel mundial en secuenciar el genoma del maíz, con lo que se evitó que industrias transnacionales patentaran este conocimiento.

Otro ejemplo de gran impacto nacional que ha realizado el Centro es el trabajo desarrollado en el Laboratorio Nacional de Genómica para la Biodiversidad, donde se generan investigaciones de determinación genómica de ancestría, las cuales han generado la biblioteca más importante del mundo para genomas de nativos americanos, que puede tener repercusiones en desarrollos para la salud.

Esas aportaciones le han valido al Centro el reconocimiento como una de las instituciones líderes a nivel mundial, incluso el Consejo Superior de Investigación Científica de España ha catalogado al Cinvestav como la vigésima novena institución científica más importante a nivel mundial, de entre 8 mil instituciones calificadas.

Si bien tomó como ejemplo las contribuciones del Cinvestav para expresar la importancia que tiene la ciencia y tecnología nacional, Mustre de León mencionó que otras instituciones también han realizado aportaciones relevantes al desarrollo nacional, por lo que exhortó a los legisladores y representantes del Gobierno Federal a tomar en cuenta la capacidad actual del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología. “Creo que sería un error no aprovechar una de las fortalezas que tiene el país, como es su sistema científico”, subrayó.

La segunda jornada del Conversatorio para el Análisis del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación se realizó el 13 de marzo en el Palacio Legislativo de San Lázaro, en la Ciudad de México, y es una iniciativa del Congreso de la Unión y el Foro Consultivo Científico y Tecnológico en el que participan más de 150 organizaciones, instituciones de educación superior, consejos estatales y otras asociaciones de este sector, para contribuir al fortalecimiento del sistema y en la elaboración del Programa Especial del Ciencia, Tecnología e Innovación.