Conexión Cinvestav / domingo, 2 de mayo de 2021 / Categorías: Boletin de prensa A 60 años de su creación, suma logros el departamento de matemáticas Los tres niveles con los que cuenta el edificio del Departamento de Matemáticas del Cinvestav, en la sede de Zacatenco, no solo alberga los cubículos de 22 investigadores que actualmente componen su planta académica (cuatro más se encuentran en la Unidad Querétaro) o los espacios por los que transitan los cerca de 80 estudiantes que actualmente están inscritos a uno de sus programas de posgrado. También han sido testigos de buena parte de la historia de uno de los semilleros científicos más influyentes del país. El impulso de la topología algebraica, marcado durante los primeros años, colocó al Cinvestav como un referente en el área a nivel internacional y atrajo a estudiantes e importantes investigadores, quienes visitaron el Centro para dar charlas o tener colaboraciones. Pero este Departamento también ha sumado a nivel social, al participar en la década de 1970, por solicitud de la Secretaría de Educación Pública, en el desarrollo del contenido de los libros de texto gratuitos de matemáticas para la enseñanza primaria, proyecto encabezado por Carlos Ímaz. Historias como esta se hacen presentes para investigadores, estudiantes o visitantes que ingresan al edificio del Departamento de Matemáticas, al encontrar en su vestíbulo las fotografías de los investigadores fundadores, los primeros artículos publicados y placas conmemorativas de diversos logros y aniversarios. Pero la influencia que han alcanzado los integrantes de este Departamento a lo largo de su historia trasciende de cualquier memorial. Matemáticas es uno de los cuatro departamentos con los que el Cinvestav inició actividades en 1961, aunque al no contar con instalaciones propias, sus investigadores fueron albergados durante los primeros dos años en la Escuela Superior de Física y Matemáticas del IPN, para después trasladarse al que sería por más de tres décadas su sede en el Cinvestav. La planta académica con la que inició operaciones contaba con destacados investigadores, como Carlos Ímaz y Samuel Gitler, encabezados por el entonces miembro de El Colegio Nacional, José Ádem, quien también fungía como asesor de Arturo Rosenblueth en la Dirección General del Cinvestav. El grupo de matemáticos del Centro no tardó en cobrar notoriedad en la comunidad científica nacional e internacional, gracias a sus aportaciones en la topología moderna, de la mano de José Adem y Samuel Gitler, quien introdujo las operaciones cohomológicas secundarias, lo que les permitió obtener contribuciones revolucionarias en el problema de inmersión euclidiana de espacios proyectivos. En el caso de Samuel Gitler, su obra de 1972, "A spectrum whose cohomology is a certain cyclic module over the steenrod algebra", publicada en la revista Topology, se convirtió en uno de los textos imprescindibles de la topología algebraica del siglo XX. La primera visita internacional fue la de Francois Bruhat, un eminente algebrista francés quien ayudó a Francisco Tomás Pons a pulir los resultados de su investigación para lograr ser el primer estudiante doctorado del Departamento y del Cinvestav. Pero la topología algebraica no fue la única área que se destacó durante los primeros años del Departamento de Matemáticas, temas como el análisis complejo, con los primeros trabajos de Enrique Ramírez de Arellano, también acentuaron la importancia que estaba cultivando el Cinvestav. Gracias a esa notoriedad, diversos investigadores llegaron al Departamento como profesores visitantes, tal fue el caso de Zdeneck Vorel, de la Academia de Ciencias de la extinta Checoslovaquia, quien colaboró con Carlos Ímaz en ecuaciones diferenciales y análisis. Posteriormente se integraron B. Durork en teoría de números; P.A. Griffiths en geometría algebraica, así como J. J. Kohn y M. Kuranishi en análisis complejo. Con este personal académico, por primera vez en México se prepararon programas de maestría y doctorado en matemáticas, semejantes a los de las mejores universidades del mundo. Esos cimientos sirvieron para que, en la década de 1980, durante la jefatura de Samuel Gitler, se establecieran intercambios con la Real Sociedad de Londres, que hizo posible la realización de investigaciones conjuntas con las universidades de Liverpool, Cambridge, Oxford, Manchester y Edimburgo. El renombre alcanzado en un corto periodo trajo consigo una serie de proyectos especiales y galardones que han continuado a lo largo de su historia. Desde sus primeros años hasta la fecha, los reconocimientos han sido una constante para estudiantes e investigadores del Departamento de Matemáticas, al contar con más de 20 distinciones nacionales e internacionales. Entre esos reconocimientos destacan los cinco premios Weizmann de la Academia Mexicana de Ciencias, a las mejores tesis doctorales en las áreas de Ciencias Exactas. Por su parte, José Ádem (1967), Samuel Gitler (1976) y Onésimo Hernández Lerma (2001) han sido merecedores al Premio Nacional de Ciencias y Artes, otorgado por el Gobierno Federal. Y los dos primeros fueron miembros de El Colegio Nacional, entre otras distinciones. En épocas más recientes, importantes reconocimientos como el Premio de Investigación de la AMC o la Cátedra Marcos Moshinsky fueron otorgados a Eduardo Santillan Zeron (2011) y Ernesto Lupercio (2012), respectivamente. Además de contar con las distinciones de Investigadores Eméritos del Sistema Nacional de Investigadores a Luis G. Gorostiza (2001) y Onésimo Hernández Lerma (2014). Sin embargo, los miembros del Departamento de Matemáticas reconocen que su mayor contribución al país han sido los cuadros científicos que han formado, los cuales suman hasta 2020 a 348 estudiantes de maestría y 145 de doctorado egresados de alguna de sus áreas de investigación. A lo largo de estas seis décadas, el Departamento se ha empeñado en conservar un equilibrio en cuanto a investigación, formación de recursos humanos, vinculación con otros sectores educativos y productivos del país, razón por la cual sus programas de posgrado están calificados con “Nivel Internacional” en el Padrón Nacional de Posgrados de Calidad del Conacyt, y a lo largo de su historia se han publicado más de mil artículos en revistas de prestigio internacional y más de dos mil 400 trabajos de matemáticas en general. Artículo anterior La ciencia como pilar para la educación y el desarrollo económico del país Siguiente artículo Concluye Foro Interuniversitario con análisis a los sistemas de financiamiento y evaluación Print 1391