Conexión Cinvestav / jueves, 29 de abril de 2021 / Categorías: Boletin de prensa Destacan la aplicación del conocimiento básico en productos tecnológicos Investigadoras del Cinvestav coincidieron en que para transferir el conocimiento de ciencia básica hacia aplicaciones, es necesario un trabajo multidisciplinario, entender los requerimientos del usuario final y un aprendizaje permanente en temas relacionados con propiedad intelectual y patentes. Esther López Bayghen, Refugio Rodríguez Vázquez y Beatriz Xoconostle Cázares se pronunciaron por crear empresas de base tecnológica vinculadas con la institución, donde los estudiantes puedan comercializar sus descubrimientos a través del desarrollo de productos que resuelvan problemas cotidianos. Al participar en el seminario “Científicas innovando: la propiedad intelectual, un factor clave”, Esther López Bayghen, adscrita al Departamento de Toxicología, destacó que los científicos y sus estudiantes deben ver a la investigación científica como una herramienta para solucionar diversas necesidades sociales, mediante un trabajo conjunto con las empresas, con el objetivo de generar algo diferente e innovador. Lograr una vinculación entre investigadores, empresas y gobierno requiere entender el proceso de costo-beneficio en el desarrollo de un producto, porque se puede tener una idea brillante, suficiencia en la solución del problema y buena capacidad para implementarlo, pero si su precio final es impagable por el usuario, no es factible. “Generar una nueva tecnología implica considerar todos sus aspectos sociales, económicos, funcionales o de logística”, señaló. Esther López, quien mediante el diagnóstico molecular ha diseñado tecnologías en la reproducción humana asistida, creación de vaginas artificiales, regeneración endometrial y aplicaciones dermoestéticas, afirmó que algunas empresas no sólo buscan aplicar nuevas soluciones, también requieren presencia en la investigación y aprender a hacer medicina basada en evidencia, lo cual obliga a los científicos a trabajar en equipos multidisciplinarios, con el objetivo de entender asuntos administrativos, de patentes o hasta de marketing. De acuerdo con Beatriz Xoconostle Cázares, investigadora del Departamento de Biotecnología y Bioingeniería, al generar un invento se debe tomar en cuenta su cadena de valor, desde la concepción hasta su llegada al consumidor, por ello es necesario establecer un vínculo equilibrado entre academia e industria, en un trabajo conjunto para obtener productos exitosos. Xoconostle Cázares, quien se ha concentrado en mejorar diversas variedades de plantas, cítricos y café resistentes a plagas herbicidas o con mayor diversidad genética, consideró que hace falta posicionar a la biotecnología nacional como una buena opción para atender necesidades del campo, porque de ninguna manera tiene baja calidad. En su oportunidad, Refugio Rodríguez Vázquez, investigadora del Departamento de Biotecnología y Bioingeniería, destacó que otra forma de transmitir el conocimiento generado en los laboratorios es a través de la creación de propuestas tecnológicas, por lo cual es necesario brindar mayor apoyo al desarrollo de la protección intelectual. Subrayó que la difusión de las soluciones tecnológicas, a través de los medios de comunicación, permite el acercamiento de las ideas a la sociedad y su llegada al mercado para beneficio de las personas. La creadora de métodos para limpiar suelos y agua contaminados con materia orgánica o metales, aplicados en la exrefinería 18 de Marzo o en el rescate de las chinampas de Xochimilco, explicó que otra forma de transmitir el conocimiento científico es a través del desarrollo tecnológico, el cual trae beneficios a la sociedad. Artículo anterior Analizan la importancia de la autonomía e independencia en el trabajo científico Siguiente artículo La ciencia como pilar para la educación y el desarrollo económico del país Print 1900